La resolución fue de los jueces de la Sala II de la Cámara Federal, al revocar la pretensión del senador Fernando Pino Solanas y el político e historiador de la deuda externa, Alejandro Olmos Gaona, de participar de la causa.

En ese marco, los camaristas Eduardo Farah y Martín Irurzun cuestionaron, en un duro fallo, la investigación que se abrió contra el Presidente; su padre, Franco Macri, y sus hermanos, por la existencia de sociedades offshore que fueron descubiertas en abril pasado, a través del escándalo internacional conocido como Panama Papers.

Según comunicó la Cámara, "el esforzado intento del señor juez instructor por mostrarse equidistante derivó en su propio alejamiento del rol de director del proceso, coadyuvando de esa forma a la actual indefinición".

La Cámara Federal sostiene que "la propia necesidad del señor fiscal de ‘redefinir’ los límites, que actualmente giran en derredor de los contornos de un entramado societario desplegado mediante el recurso jurídico de las sociedades offshore en varios países, es su más fiel expresión".

A criterio del tribunal de alzada, "la pesquisa y, a casi un año de su inicio sin avances cualitativos en lo que hace a la hipótesis inicial, han irrumpido sus límites desdibujándolos de forma tal que, incluso, el objeto de otros procesos se está viendo alcanzado por la extensión que actualmente se ha dado a la presente".

"A esta altura es de mencionar que sólo su particular método de llevar adelante esta causa -diverso al que se observa en otros procesos en los que interviene-, ha dejado sin norte la investigación", añadió el tribunal.

Las críticas sobre el rumbo de la investigación surgen de un fallo en donde la defensa de Franco Macri cuestionó el papel de "amicus curiae", que se le había dado a Solanas y Olmos, porque su incorporación al expediente "afecta la igualdad de armas" e "inclina el proceso en perjuicio" del empresario.

La Cámara entendió que había que apartarlos, porque su vinculación con la causa "se vincula con circunstancias acaecidas en los años ‘80" y no estaba justificada tampoco en la condición de senador de Solanas.

Cabe recordar que el apellido Macri estaba en la lista de documentos confidenciales vinculados a la firma panameña Mossack Fonseca, por lo cual el Presidente quedó formalmente imputado por "omisión maliciosa" y "lavado de dinero".