El mes pasado, en una de las últimas sesiones, Rozas se cruzó públicamente con la vicepresidenta Gabriela Michetti porque le negó una cuestión de privilegio a él y al también radical Juan Carlos Marino para responder a acusaciones que les habían lanzado desde el bloque del peronismo por su participación en la controvertida sesión del Consejo de la Magistratura que abrió el proceso de juicio político al camarista Eduardo Freiler. “Usted se cree dueña del Senado”, le llegó a decir Rozas a la vicepresidenta. Tenía razón en enojarse porque, según el reglamento de la Cámara, a ningún legislador se le puede negar la facultad de expresarse mediante una cuestión de privilegio. Rozas ayer no participó de la reunión que mantuvieron el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, con los principales referentes de Cambiemos para definir la agenda legislativa del último tramo de 2017, con un eventual llamado a extraordinarias, de la que sí participó, por ejemplo, su correligionario, el diputado cordobés Mario Negri, con mucha mejor sintonía con la Casa Rosada. De todos modos, Rozas aclaró que seguirá como integrante del bloque radical en el Senado y mantendrá su pertinencia al oficialismo. El senador nacional por Corrientes Pedro Braillard Poccard (Encuentro por Corrientes) será el reemplazante del chaqueño en la titularidad de la bancada oficialista, indicaron en tanto fuentes de Cambiemos. Rozas dio a conocer su decisión de dimitir cuando finalizaba la reunión del interbloque del oficialismo en el que se preparaba la sesión especial que se desarrollará hoy en el Senado.