En la provincia de Entre Ríos hay 1282 detenidos, lo que significa un 70 por ciento más del promedio que se tenía en los últimos años. Este crecimiento provoca en algunas unidades carcelarias una saturación en la capacidad disponible.

El titular de la Cámara de Casación Penal de Paraná, Rubén Chaia, explicó que “antes de la implementación de la Reforma Procesal Penal y la creación de la Cámara de Casación, que implicaron una mayor celeridad a la hora de realizar los juicios y resolver recursos, había entre 600 a 700 personas privadas de su libertad tanto procesados como condenados”.

En la actualidad, “la cifra se eleva a 1.282, es decir un incremento del 70 por ciento”.
El magistrado aclaró que de ese total, “unos 235 penados corresponden a la Justicia Federal. Son 1.047 los reclusos de la Justicia provincial: 968 son penados y hay 79 personas que están procesadas en prisión preventiva a la espera de juicio o bien que fueron sido juzgados pero su sentencia aún no está firme”.
Al ser interrogado a propósito de la capacidad actual de las Unidades Carcelarias para seguir admitiendo personas privadas de su libertad, Chaia declaró en Radio Máxima que “en Paraná hay algunas dificultades pero lo que se está haciendo es habilitar casas de pre-egreso para 14 personas donde se aloja a quienes ya están por lograr su libertad y de esa forma se descongestiona el penal”.