El juez federal Daniel Rafecas desestimó la posibilidad de que se reabra la causa por presunto encubrimiento del atentado a la AMIA que había presentado el fallecido fiscal Alberto Nisman contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner y funcionarios de su gobierno.

"En su momento desde la DAIA fueron respetuosos del fallo pero en los últimos meses parece que han cambiado el parecer y ahora tienen una propuesta concreta de reapertura", dijo el magistrado en declaraciones a Radio Del Plata, que reproduce NA.

El juez consideró que es una decisión "bastante difícil" que se pueda conmover porque a los argumentos que había sostenido en febrero de 2015 se les agregaron los de la Cámara Federal ratificando ese fallo y los de la Cámara de Casación, que agregó nuevos elementos para confirmar la desestimación.

Rafecas dijo que "los dos elementos que ha presentado la DAIA" no le parecen "para nada convincentes: uno es el hecho de que la inconstitucionalidad con el Pacto con Irán ahora está firme pero ese elemento termina de consolidar la desestimación porque quiere decir que nunca jamás va a haber posibilidad que se cometa un delito porque el pacto nunca entró ni va a entrar en vigencia". Y el otro elemento señalado por el juez es el caso del audio del ex canciller Héctor Timerman, al que no se lo presentaron "como una prueba nueva" en la causa que él lleva adelante y, por lo tanto, no pudo pronunciarse al respecto.

Un juez en la mira

Por otra parte, Rafecas señaló que no le consta que quieran echarlo del cargo y se jactó de haberse "manejado de forma independiente a cualquier poder político".

"Durante los 12 años que llevo como juez federal tuve un apego a la ley y al derecho, y muy clara la independencia del poder político, de los poderes fácticos y los grupos de presión. Si hay lobbies relacionados con la Secretaría de Inteligencia en Comodoro Py, en mi juzgado nunca entraron o no nos consta. Nunca tuvieron ninguna relación ni la vamos a tener con esos supuestos lobbies", afirmó.

Caso López

En relación con la investigación al ex secretario de Obras Públicas del kirchnerismo, José López, Rafecas sostuvo que "está limitado por la índole del delito que es el enriquecimiento ilícito, que se circunscribe a José Francisco López y en todo caso a terceras personas que pudieran haber participado del delito de este funcionarios".

"Por eso ahora fueron traídos a procesamiento la esposa de López y dos empresarios que habían aparecido como propietarios de una vivienda en la localidad Luján pero se estableció que en realidad el verdadero dueño era López y estos empresarios figuraban como prestanombres", precisó.

Señaló que "la posibilidad de que se ramifique hacia arriba no está presente en esta causa" y que "cualquier información que pueda ser de información para rastrear el origen de ese monto de 10 millones de dólares van a ser puestas en conocimiento de la causa que corresponda", sobre lo cual indicó que "puede ser Sueños Compartidos, obra pública o Skanska".

"En principio, el delito en está probado. El delito de enriquecimiento ilícito se consuma con la no justificación de parte del funcionario de los bienes o dinero que se le imputan. Con eso me basta para elevar la causa a juicio oral y va ser el punto sobre el que va a girar una eventual condena", subrayó.

Respecto a la monja Inés, que es la que aparece en el video agarrando una mochilla y arrastrándola para adentro del convento, "la pregunta clave si las religiosas sabían o debían saber que López estaba llevando dinero o bienes de origen ilícito", dijo Rafecas, y al respecto señaló que "hasta el momento eso no está probado".

"En un principio las monjas no vieron el arma sino que la vieron recién cuando llegó la policía", dijo el magistrado, respecto de la escopeta que estaba en el suelo mientras la monja Inés metía los bolsos de López al convento.

"Está certificado que son religiosas, viven apartadas de la sociedad, no tienen cuentas corrientes, tarjeta corrientes celular, auto y no registran movimientos en la AFIP y en la ANSES. Es cierto que son religiosas", confirmó.