PROVINCIALES
3 de agosto de 2017
¿Para qué sirven las PASO en Entre Ríos?
En la recta final para las PASO del 13 de agosto sigue siendo muy alto el nivel de desconocimiento que expresa el electorado sobre la elección. Aquí un resumen de lo que se pone en juego en estas primarias en la provincia.
A diferencia de lo que ocurre en otros distritos del país donde no hay competencias internas, en Entre Ríos las PASO del 13 de agosto sirven para lo que fueron creadas. Es que aquí sí hay internas. Y el electorado definirá en agosto los candidatos que llevarán a octubre las principales fuerzas políticas.
Las legislativas de este año se hacen para elegir a cinco diputados nacionales que represenntntarán Entre Ríos en el Congreso de la Nación. Y hay cuatro fuerzas políticas que competirán en las elecciones del 22 de octubre para ocupar esas bancas:
1) El peronismo, que suma al PJ (que preside el gobernador Gustavo Bordet y tiene como vicepresidente al ex gobernador Sergio Urribarri) con el FEF, que lidera el ex gobernador Jorge Busti, alineado nacionalmente con Sergio Massa.
2) Cambiemos (alianza de UCR, PRO, GEN y sectores del peronismo).
3) El Encuentro Social (una nueva alianza entre el massista Emilio Martínez Garbino, el Partido Socialista y otras agrupaciones).
4) La izquierda, que en Entre Ríos se expresa en el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST).
De las cuatro propuestas, las dos últimas anotaron una lista única y por lo tanto no tendrán competencia interna el 13 de agosto. Pero las dos primeras, que son las fuerzas mayoritarias de Entre Ríos, sí tendrán competencia interna. En Cambiemos hay 3 listas y en el PJ se anotaron 10.
Eso hará que en el cuarto oscuro del 13 de agosto los electores entrerrianos se encuentren con 15 boletas: 10 del peronismo (todas de color azul); 3 de Cambiemos; más las dos que llevan lista única (el MST y el Encuentro Social). Mirá los nombres de todos los precandidatos en la siguiente nota:
Peronistas
En teoría, cualquiera de las 10 listas anotadas en el peronismo o de las 3 que compiten en Cambiemos podría ganar. Pero en ambos casos hay listas “oficiales” que corren con ventaja.
En el peronismo es la Lista Nº 2 "Somos Entre Ríos", que es la única que avalan Bordet, Urribarri y Busti.
En contra del acuerdo que involucra a los tres últimos gobernadores peronistas se alzaron tres posiciones políticas críticas:
-Una desde el peronismo que nunca fue kirchnerista y que encabeza el ex senador Augusto Alasino, con una crítica dirigida especialmente a Urribarri.
-Dos desde el kirchnerismo: la Lista Nº 10 "Unión Ciudadana”, que encabeza el actual diputado Jorge Barreto; y la Lista Nº 2019 "La Patria es el otro", que tiene como primera candidata a la ex presidenta del Consejo General de Educación, Claudia Vallori. Son dos opciones del kirchnerismo que cuestionaron la relación mantenida por Bordet con el presidente Mauricio Macri y no se bancaron el acuerdo electoral con Busti.
De las dos, la de Barreto aparece más consolidada, sobre todo tras el apoyo que recibió este martes de uno de los referentes del peronismo de Paraná, el diputado Julio Solanas.
Las seis listas restantes no tienen una identificación definida en este aspecto y tampoco se han preocupado por tenerla. La mayoría ni siquiera se ha molestado en difundir su existencia, con excepción del siempre candidato Gerardo González, a esta altura un clásico sparring de las internas del PJ. Da la impresión que fueron armadas con el propósito de que desde el oficialismo se les ofreciera algún acuerdo para que no compitan. Pero la decisión de Bordet fue permitir que compitan todos, después de muchos años en los que eso no pasaba, bajo la conducción de Urribarri.
Tanto fue así, que el PJ terminó aceptando la inscripción de muchas listas un poco flojas de papeles. En cualquier caso, el 13 de agosto todas sumarán para el caudal de votos que pretende exhibir el peronismo en las PASO. Los que se anotaron por mera especulación ahora están obligados a no pasar vergüenza.
Cambiemos
En Cambiemos la discusión interna es más simple y clara. Hay dos listas que se plantaron en contra de la voluntad del gobierno nacional de evitar la interna: la Nº 502-A “Ayudanos a cambiar”, que encabeza Alejandro Carbó, y la 502-B “Renovación” que tiene como primera candidata a Gracia Jaroslavsky.
Concretamente, son expresiones contrarias a la acción política del ministro del Interior, Rogelio Frigerio, como hombre fuerte de Cambiemos que bendijo la lista 502-C “Cambiemos Juntos”, encabezada por Atilio Benedetti.
La que encabeza el radical Carbó contiene al ala del PRO que no pudo competir en la interna para la renovación de autoridades partidarias, con fuertes críticas a la conducción política de Frigerio. Es, de hecho, la lista de la interna de Cambiemos que más candidatos macristas lleva.
La que encabeza Jaroslavsky expresa principalmente a las resistencias que se dieron en la interna radical a la lista oficial que aprobó la mesa nacional de Cambiemos. Es, por otro lado, la única lista de Cambiemos que encabeza una mujer y que contiene al GEN y la Coalición Cívica.
Primera vuelta
Si las listas oficiales del peronismo y Cambiemos se terminaran imponiendo con comodidad en sus respectivas internas –sin inclusión de minorías- el efecto más importante de las PASO de Entre Ríos sería finalmente como el de Buenos Aires: operarían como una primera vuelta electoral que establecería un escenario para la disputa de octubre, la virtual segunda vuelta que define las cosas.
En cualquier caso, las PASO permitirán saber que tan polarizada se presenta la elección legislativa en la provincia. Si la polarización peronismo-Cambiemos es marcada, la distribución de las cinco bancas será de 3 para el ganador y 2 para el segundo.
En tal caso, la elección legislativa de Entre Ríos se limitaría a definir si el quinto diputado es para un bustista o para un radical, como ya vaticina el tercer candidato de Cambiemos, Jorge Lacoste.
Si, por el contrario, las PASO no ofrecen un escenario tan polarizado, el Encuentro Social o el MST podrían aspirar a ocupar al menos una de las cinco bancas.
Por lo pronto, ambas fuerzas están obligadas a obtener un piso del 1,5% de los votos para poder competir en las generales de octubre. Ni los socialistas ni el MST lo alcanzaron en 2015 para la categoría de diputado nacional. (Paginapolítica)