El juez Isidoro Cruz resolvió declarar la “nulidad del proceso judicial y la sentencia” dictada contra Sala en el juicio contravencional realizado en 2016, aunque hasta este martes por la noche no se habían dado a conocer los fundamentos.

La dirigente social, que continuará detenida por otras causas en las que está imputada, había sido condenada en diciembre del año pasado a 3 años de proscripción en vida social, cultural y política, más una multa de 3.780 pesos.

Los abogados de Sala, Ariel Ruarte y Paula Alvarez Carreras, habían pedido en enero la revisión integral del juicio contravencional, al considerar que la resolución “no fundamentó la condena ni se presentó un solo argumento que permita sostener las sanciones”.

La líder de la organización Tupac Amaru fue detenida en un primer momento, en enero de 2016, por el acampe de 52 días realizado por la agrupación frente a la Casa de Gobierno de Jujuy.

Por ese hecho, fue imputada en dos causas: una penal y otra contravencional; la primera fue desestimada a los pocos días, y la segunda avanzó hasta la condena que realizó el Juzgado Contravencional N1 de Jujuy, en diciembre de ese mismo año.

La justicia la condenó por el delito de “ocupación del espacio público, alteración del orden y obstrucción del tránsito vehicular y peatonal”.

En lo que respecta al resto de las causas contra Sala, por las cuales sigue detenida, hace unos días la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que depende de la Organización de los Estados Americanos (OEA), comunicó que a fines de junio visitará a la dirigente para conocer las “condiciones de su detención, su estado físico y también emocional”.

Además, la Corte Suprema de Justicia deberá expedirse, en las próximas semanas, sobre una causa contra la dirigente por presunto fraude y extorsión.