El titular del directorio del Iosper, Fernando Cañete, informó a los afiliados a través de los medios de comunicación, la cantidad de prestaciones brindadas por la obra social entrerriana durante el 2017, lo que representa “el esfuerzo y el gran compromiso del organismo para tratar de mantener el servicio a los afiliados y fundamentalmente cumplir con los prestadores”, acentuó el funcionario.

En esa línea, precisó que durante el año que acaba de finalizar, Iosper “a través del aporte del Gobierno y de los afiliados”, afrontó “el abono de 250 millones de pesos de reintegro en todo el año (reintegros que tienen que ver con discapacidad, geriatría, psicología, etc), 31500 internaciones con una inversión de 380 millones de pesos, 1,3 millones de consultas, 700 mil prácticas bioquímicas y de otras índoles lo que totalizó una inversión de 320 millones de pesos”.

“Hemos cubierto casi 1980 cirugías de cataratas (una prestación bastante alta lo que significa que le estamos dando una buena prestación); hemos brindado 16 trasplantes cocleares, entregamos más de 600 audífonos, realizamos más de 2900 trámites de prótesis y  por supuesto hemos cubierto los medicamentos con el 32 por ciento del presupuesto; medicamentos de alto costo, para tratamientos oncológicos, HIV y todo lo que está cubriendo la obra social”, destacó Cañete.

Esta Agencia sobre el último punto, que representó casi 900 millones de pesos en medicamentos, le preguntó cuál es la lectura comparativa con el 2016: “Hemos tenido más casos de enfermos oncológicos y medicamentos de alto costo.  La semana pasada terminamos de pagar uno que sale 4,2 millones de pesos y se paga cada 45 días. Hace dos años atrás a eso no lo teníamos”, reveló Cañete como respuesta.

A su vez, subrayó que el año finalizó “en el tema medicamentos con la variación del dólar que impacta muy fuerte en la obra social”.

En el mismo tono, consideró que “ha habido un crecimiento muy importante de la obra social”, lo que estuvo motivado entre otros puntos por “la demanda de nueva tecnología”.

“Este fin de semana ingresó un amparo de una silla de ruedas de 800 mil pesos; algo impensado, esto nos ubica en que la alta tecnología y los altos costos llegan a tener una demanda muy alta hacia la obra social; además del abuso que hacen muchos utilizando algunas cuestiones muy particulares. Por ejemplo a través de los amparos, o algunos que con la discapacidad están haciendo muy buenos negocios”, mencionó.

El presidente de la obra social estatal no dejó pasar la oportunidad para destacar el valor de los acuerdos cerrados con las entidades que agrupan a médicos como Femer y la de clínicas y santarios, Acler.

“Los acuerdos arribados son muy positivos y favorables para la obra social. Todos pregonaban un año conflictivo con los prestadores y gracias a dios esto no se ha dado”, finalizó. (APFDigital)