El río Paraná se encuentra este viernes en 34 centímetros por debajo del nivel 0 a la altura del puerto de la capital entrerriana. Al evaluar que “se anticipó la bajante del río, porque se preveía que no iba a llegar a niveles debajo del 0”, el director provincial de Hidráulica, Cristián Gietz, comunicó a Elonce TV que “se pronostica, para todo el trimestre, que el nivel del río se mantenga y que crezca un poquito porque desde el norte de Brasil, en la naciente del río Paraná, habrá aportes de lluvias durante el mes de enero”.

“Pero seguirá habiendo déficit hídrico, que se arrastra desde los últimos meses, en toda la zona del Litoral argentino, donde los patrones lluviosos ya se anticipan como deficitarios”, alertó el ingeniero.

Y en relación a lo que se denominan “las lluvias de verano”, Gietz comunicó que “a partir de la mitad del mes de enero habrá un ingreso de agua que hará cambiar el nivel del río”.

“La bajante se está prolongando más de lo que desearíamos, la sequía ya lleva dos años y medio con altos y bajos. Y se prevé que La Niña, que estuvo instalada en el último trimestre de 2021, continúe durante el primer trimestre de 2022”, anticipó en relación a los pronósticos.

Consultado al especialista por la incidencia de la altura del río en la disponibilidad de playas, éste detalló: “Con los bajos niveles del río, hay mucha playa seca porque toda la arena que se preveía que iba a estar cubierta con agua, al retirarse el nivel, se va hacia zonas en las que probablemente puede haber barro; entonces, la playa húmeda disponible para el bañista no es de las mejores condiciones”.

Punto aparte, estimó que “no habrá grandes problemas” en aquellas localidades que tienen tomas de agua sobre la ribera del río Paraná.

Respecto de las recomendaciones para los navegantes, el funcionario provincial indicó: “El río es muy cambiante, sobre todo por estas subidas y bajadas de los niveles; el movimiento del lecho del río es muy dinámico y podría haber cambios en la configuración de las dunas que están bajo agua y eso puede ocasionar algún tipo de problema”.

Y en relación a la navegación fluvial, Gietz refirió que “desde el punto agroexportador del puerto de Rosario, desde 2020, las grandes embarcaciones salen con sus bodegas a mitad de capacidad debido al poco calado que pueden utilizar; hay ciertos pasos críticos que no los pueden superar si van con carga completa”.