Estos mismos rivales se habían enfrentado la semana pasada en La Plata con victoria pincha por 1 a 0 (gol de Javier Toledo), en los que fueron los primeros tres puntos cosechados por los dirigidos por Nelson Vivas, algo que hoy lograron los colombianos, por lo que al cabo de cuatro jornadas ambos comparten el último puesto de la zona con esa misma cantidad de unidades.

Por esto y aún cuando debe jugar ante Barcelona (le ganaba 2-0 a Botafogo al término del primer tiempo en Brasil y encabezaba el grupo con 10 unidades contra 7 de su vencido) en Ecuador y los albinegros en La Plata (en Río de Janeiro cayó 2-1), hoy por hoy la máxima aspiración que parece quedarle a los capitaneados por Juan Sebastián Verón es alcanzar el tercer lugar en la zona que les permita acceder a la Copa Sudamericana 2017, aunque inclusive para eso en este momento los colombianos lo aventajan por diferencia de gol.

En cuanto al partido de esta noche, los anfitriones hegemonizaron el juego de punta a punta, aún cuando el zaguero Leandro Desábato indicara al final del encuentro que "las oportunidades de gol que se presentan cuando se actúa como visitante no se pueden desperdiciar, porque después se terminan pagando en el arco propio".

Pero lo concreto fue que Atlético Nacional siempre fue más que el conjunto albirrojo y en los últimos 10 minutos del primer tiempo pudo plasmar en la red esa superioridad para liquidar prematuramente el encuentro, aún cuando quedaba una etapa entera por delante.

Es que la realidad observable daba cuenta de la impotencia de este Estudiantes sin llamas encendidas, en el que el andar cansino del veteranísimo Verón significaba una ventaja demasiado importante para una patriada de esta naturaleza, mientras el pibe Santiago Ascacíbar esperaba en el banco la posibilidad de volcar toda su juvenil energía en un equipo que lo necesitaba "demasiado".

Así el futuro del equipo platense, más allá de esa remotísima posibilidad de llegar a los octavos de final desde el último lugar del grupo que hoy ocupa y la un poco más probable de ingresar a la Sudamericana, lo que le queda por luchar con posibilidades reales de éxito es el acceso a la Libertadores del año próximo entre los cinco primeros del actual campeonato de primera división del fútbol argentino en el cual ocupa el cuarto escalón y el fin de semana estará recibiendo al líder Boca.