La ceremonia se realiza en el campo de juego con la presencia de autoridades y honores militares, familiares de las víctimas de la caída del avión que llevaba a los jugadores hacia Medellín a jugar la final de la Copa Sudamericana.

El velatorio se realiza bajo una tienda con la inscripción: "En las alegrías y en las horas más difíciles mi huracán es siempre un vencedor. Gracias, Chapecoense, Atlético Medellín".

Las hinchadas organizadas de varios clubes, presentes en una demostración inédita de unidad, cantaban todas por Chapecoense, lanzando bengalas verdes y blancas.