Boca le ganó 2 a 0 a Palestino y logró clasificarse a los octavos de final con puntaje ideal. Ganó los seis partidos que disputó en el Grupo 5 de la Copa Libertadores y terminó en lo más alto de la tabla general. El único que lo puede alcanzar es Corinthians pero para eso deberá ganar los dos encuentros que le quedan y obtener una diferencia de nueve goles.

El equipo de la Ribera no jugó bien el primer tiempo. Le costó tener claridad en los últimos pases y profundidad por los costados. El "Vasco" apostaba a que Chávez y Martínez fueran desequilibrantes por los costados pero ninguno de los dos pudo generar peligro en las cercanías del área chilena.

Palestino le planteó un partido complicado a Boca. Desde el primer minuto de juego salió a buscar un gol y a jugar el mayor tiempo posible en campo rival. Guede le pidió a sus jugadores que se proyecten por los costados y toquen corto para generar juego.

El planteo visitante lo incomodó a Boca. Por momentos lo obligó a retroceder en el campo de juego y aprovechó los desajustes que tuvo el esquema defensivo por las bandas. Monzón y Marín perdieron en la mayoría de los mano a mano y desprotegieron el área "xeneize".

El conjunto chileno se robó el protagonismo en la primera mitad. Se encontró con un rival desfigurado y partido. Boca sufrió la falta de conducción por las ausencias de Lodeiro y Gago, aunque el número cinco ingresó en el desarrollo del segundo tiempo para sumar minutos de juego.

Riquelme fue la gran figura de Palestino.El delantero argentino generó una preocupación constante en el área de Boca. Ingresó siempre por los costados y tuvo dos posibilidades claras con remates que Orion logró despejar.

Palestino presionó en el medio campo en forma compacta. Trató de ganar terreno luchando en el medio y retrocedió rápido cada vez que Boca le robó la pelota. A Cubas, que regresó al primer equipo después de estar lesionado, se lo notó fuera de ritmo. Su falta de fútbol le jugó una mala pasada al medio "xeneize".

En el entretiempo, la Bombonera se quedó sin luz. El segundo tiempo arrancó pero a los dos minutos el árbitro tuvo que parar el juego porque algunos focos volvieron a pararse. El inconveniente con la iluminación generó que el partido estuviera parado por ocho minutos.

En el segundo tiempo fue incrementando el ritmo del partido. Para Boca fue clave el ingreso de Fernando Gago, a los 25', por Cubas. El volante le aportó ritmo y claridad al ataque de Boca. Abrió los espacios y trató de jugar con toques cortos para elaborar un juego ordenado.

El ingreso de Vadalá por Martínez también le aportó frescura y velocidad al equipo del "Vasco". Boca se renovó del medio hacia adelante y tuvo mayor dinamismo para atacar. A los 81' Marín abrió el marcador. Después de un córner enviado por Castellani, el lateral se desmarcó y metió un cabezazo en el área chica que se metió contra el palo izquierdo del arquero Melo.

A los 92' Calleri cerró la historia en la Bombonera. Sacó un derechazo después de un pase de Vadalá y convirtió el 2 a 0 que hizo estallar al público. El triunfo llegó de la mano de una mayor claridad en la elaboración del juego. La pieza fundamental fue Fernando Gago.

Boca terminó su grupo primero y quedó en lo más alto de la tabla general. Para que Cortinthians logre destronarlo, deberá ganar los dos encuentros que le quedan (San Lorenzo y San Pablo), y lograr una diferencia a favor de nueve goles. Si así no ocurriese, Boca y River se enfrentarán en los octavos de final de la Copa Linbertadores.