En los tiempos difíciles que estamos atravesando todos los entrerrianos, debemos poder mostrarle a nuestra provincia, las capacidades que nos forman, y que nos demuestran lo que somos.

Los docentes tienen en sus manos el futuro de cada uno de   nuestros niños, jóvenes, de nuestra provincia, por eso les pedimos que contemplen la necesidad y el entendimiento del por qué las aulas tienen que estar abiertas.  

Los paros son un derecho de los trabajadores, pero a la vez son deberes en cuanto a la responsabilidad que tienen al ejercer su labor, frente a los niños, sus familias y a la comunidad toda.

El paro no es contra el Gobierno, solamente. Acarrea también parar en el saber.

Desde que iniciamos este gobierno, y me atrevo a decir que mucho antes, el gobernador, y todos quienes hoy ocupamos un lugar en este gobierno, pensamos como eje fundamental la educación, los docentes y los niños, intentando desde el primer día ayudarlos a cambiar la historia en la que los docentes estaban inmersos, dándoles los derechos de un trabajo digno y genuino.

El gobernador Rogelio Frigerio, busca la estrategia adecuada para cada uno de los sectores que forman parte de la educación.

Llegar a una conciliación nos hace que entendamos que los derechos de todos, valen, y que cada uno de quien nos representa, nos represente como corresponde, con valor e igualdad ante todo.

Como gobierno, ponemos a disposición lo que tenemos. Dejamos en sus manos aceptar esta propuesta para cambiar la lucha de tantos años de los docentes, y de no ser escuchados.

No todos los docentes entrerrianos son parte de un gremio o sindicato, solo un porcentaje de ellos. Si todos los docentes son quienes representan la comunidad educativa entrerriana.