15 de mayo de 2017
Central humilló a Newells y lo alejó de la pelea
Rosario Central hizo valer su contundencia y derrotó a Newell’s por 3-1 en el clásico rosarino disputado en el Parque Independencia, que terminó con incidentes con los hinchas locales que colmaron el Coloso Marcelo Bielsa.
Federico Carrizo y Marco Ruben, en la primera etapa, y Germán Herrara, a un minuto del final del partido, le dieron la victoria al conjunto auriazul, que de esta manera se tomó revancha de la derrota que sufrió en el Gigante de Arroyito en la séptima fecha del certamen.
Para el equipo rojinegro descontó Mauro Formica a dos minutos del cierre cuando Central ya jugaba con un hombre menos por la expulsión de José Leguizamón.
El triunfo mantuvo a Central en zona de Copa Sudamericana, mientras que Newell’s, que sumó su segunda derrota consecutiva como local, quedó más complicado en su lucha por darle caza a Boca, el puntero del certamen.
Arrancó mejor el local que cuando no se había cumplido un minuto contó con una chance clara desperdiciada entre Formica y Joel Amoroso. Pero de ahí en más Central niveló las cosas ejerciendo mucha presión y tuvo su premio sobre los 9 cuando Facundo Quignón perdió la pelota en el medio y dio lugar a un contragolpe en el que participaron Teo Gutiérrez, Ruben, Washington Camacho, con un taco exquisito, para que finalmente Pachi Carrizo definiera con un remate al palo más alejado de Luciano Pocrnjic.
Fue un baldazo de agua fría para el local, que tuvo que salir a buscar la igualdad pero le faltaron ideas. Para colmo, sobre los 31, Gustavo Colman sacó un centro desde el vértice del área y Ruben, con su estirpe goleadora, puso el 2-0 con dedicatoria a la memoria de su abuelo fallecido una semana atrás.
El Parque Independencia quedó mudo, mientras Central se iba al vestuario ganando por dos goles tras haber llegado tan sólo en un par de ocasiones. Era contundencia pura.
En el complemento sorprendió la poca actitud mostrada por los jugadores rojinegros para ir en busca del empate. De hecho, fue Central el que tuvo chances para aumentar durante la media hora inicial desaprovechadas por Camacho y Carrizo.
En el epílogo, la expulsión de Leguizamón y el descuento de Formica ilusionaron a las 30.000 almas rojinegras que poblaron el Parque. Pero el sueño duró poco. A los 45 minutos Herrera marcó el 3-1 y Federico Beligoy, pese a haber adicionado 4 minutos, pitó el final porque le estaban arrojando mástiles de plástico al arquero Diego Rodríguez, además de un proyectil que dio en la cabeza del juez asistente Ezequiel Brailovsky.
Terminado el partido hubo balas de goma de la policía ante incidentes de los hinchas frustrados. Festejó Central, se desquitó de la derrota sufrida en Arroyito en la séptima fecha y complicó a su clásico adversario, que entró en una racha negativa de la que no parece poder salir.