Durante una protesta antirracista, francotiradores asesinaron a cinco policías e hirieron a otros seis en la ciudad estadounidense de Dallas. El confuso episodio sucedió cuando finalizaba la manifestación -convocada por los recientes asesinatos de dos afroamericanos a manos de efectivos policiales- en centro de la ciudad. 

"Había negros, blancos, latinos, de todo. Era la protesta de una comunidad mixta. Y de pronto (los disparos) salieron de la nada. Teníamos la impresión de que nos disparaban a nosotros. Era una cosa de locos", manifestó un testigo de los hechos.

El caos se propagó cuando uno de los dos francotiradores intercambió balas con agentes policiales, mientras advertía que el centro de la metrópoli estaba repleto de explosivos.

Si bien las autoridades anunciaron el arresto de tres sospechosos –dos hombres y una mujer- y la muerte de uno de los dos tiradores, aún no pudieron confirmar haber capturado a todos los responsables de la masacre.

Testigos del hecho utilizaron sus cuentes en redes sociales para subir videos de los hechos que conmovieron a la ciudad del centro sur de los Estados Unidos.

Uno de los presentes en la marcha, Ismael DeJesús, narró para la cadena CNN cómo sucedieron los hechos en el sector donde él estaba. Un hombre “junto a una columna disparaba hacia la izquierda, hacia la derecha, al otro lado de la columna, disparando contra alguien”, sostuvo el hombre.

Y agregó: “Luego se dio vuelta para asegurarse que no venía nadie, pero un agente vino por el lado derecho. El policía intenta sorprenderlo pero la cosa no termina bien”. “Pareció unaejecución, honestamente. Se paró sobre él después de que ya estaba caído. Le disparó tal vez tres o cuatro veces en la espalda”, concluyó.

Desde Varsovia, adonde viajó para asistir a una cumbre de la OTAN, el presidente Barack Obama denunció un ataque “salvaje, calculado y despreciable contra las fuerzas del orden”. La protesta de Dallas era una de las tantas manifestaciones en varias ciudades de Estados Unidostras la muerte de dos negros a manos de policías en Luisiana y Minnesota esta semana.

Los francotiradores que abrieron fuego hacia el final de la manifestación apuntaron claramente a los policías.

El cuerpo de policía calificó el ataque, en el que también hubo seis agentes heridos, de “incidente terrorista”.