La UVI, es una unidad que a su vez se indexará de acuerdo con la evolución del índice CER (Coeficiente de Estabilización de Referencia). Y ahí es donde se produce la controver-sia. El Ministerio de Hacienda dispuso, ante la ausencia de un índice confiable del INDEC, que el CER refleje la evolución de la inflación medida por la provincia de San Luis. Claro que algunos meses antes había elegido la de la Ciudad de Buenos Aires. Como la inflación porteña tenía metida adentro el ajuste tarifario y por ende el salto era mayor que el de las provincias, se optó aplicar otra me-dición.

Futuro

El CER se ajusta diariamente y, según dispuso Hacienda, hasta el 25 de junio se regirá según los resultados que dio la inflación de San Luis en la última medición. ¿Qué sucederá a partir del 26 de junio? La lógica indica que debería tomarse la medición realizada por el INDEC, que ahora sí goza de alta confiabilidad y que dio incluso varias décimas por encima de la llamada "inflación Congreso".

Pero las cosas no son tan lineales. El propio ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay, le dijo a periodistas la semana pasada que era un error mirar la inflación del INDEC para entender la evolución de los precios, al menos este año. "Hay que mirar la inflación de todo el país, no sólo la de Buenos Aires o el conurbano", señaló. El detalle es que el IPC que ayer divulgó el organismo estadístico sólo abarca a la Ciudad de Buenos Aires y 24 partidos del conurbano, como se hizo históricamente.

Aún está por verse si Hacienda dispone la semana próxima que el CER comience a regirse por el índice divulgado por el INDEC o prefiere la medición de San Luis. No se trata de un tema menor: la evolución del CER impacta en el precio de los bonos y también en el ajuste mensual que tendrán 

los nuevos créditos hipo-tecarios con ajuste de acuerdo a las UVI. La mayoría de los bancos que se había comprometido en su momento ya lanzó las ofertas, que en la mayor parte de los casos apuntan a quienes cobran planes sueldo dentro de cada institución.

Pero aún cuando Hacienda disponga que el CER se moverá a partir de ahora según el IPC del INDEC, no se termina la polémica. ¿Por qué el deudor hipotecario sufrirá un ajuste mayor de su préstamo si podría tener un incremento 6 o 7 puntos menor si se tomara en cuenta la inflación a nivel nacional o de una provincia en particular? En esta situación, el incremento de la cuota podría superar tranquilamente la suba de sueldos que recibirán en los próximos doce meses.

El tema es relevante no sólo por 2016, sino por los próximos dos o tres años. Las propias autoridades del Gobierno nacional reconocen que el ajuste tarifario continuará el año que viene, abarcando los servicios de transporte, luz, gas y agua. Pero ese aumento volverá a recaer sobre todo sobre la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano, donde la tarifa estuvo congelada durante casi quince años (especialmente la energía eléctrica). Por lo tanto, si el nuevo CER pasa a reflejar el nuevo índice del INDEC se estaría "condenando" al deudor a enfrentar ajustes mucho más importantes que tomando en cuenta la inflación a nivel nacional, aunque los inversores en bonos festejarían esa posibilidad.