Con un gol de Diego Vera, en el arranque del segundo tiempo, el Rojo derrotó al Sabalero y sigue con puntaje perfecto desde la llegada de Pellegrino, con cuatro triunfos. 

Cuatro por cuatro. Desde que Mauricio Pellegrino se sentó en el banco de Independiente, el Rojo se subió a una onda verde de la que no se quiere bajar más. En Santa Fe, le ganó 1-0 a Colón con un tanto del goleador uruguayo Diego Vera y alcanzó su cuarta victoria consecutiva. Así, llegó a 32 puntos y se instala en el lote de arriba.

El primer tiempo estuvo plagado de imprecisiones. Independiente manejó mejor la pelota con una saludable intención de salir jugando por abajo. Con Jesús Méndez y el Marciano Ortiz como ejes en el medio y Pisano y Benítez, que tuvieron poca participación, para romper en el frente de ataque. Arriba, Vera y Albertengo debían bajar demasiado para agarrar la pelota.

La más clara del Rojo fue un derechazo de Méndez desde afuera que tapó muy bien Jorge Broun. Después, una maraña de intentos que se diluían al llegar al área. Colón peleó más de lo que jugó. Darío Franco le pedía a Alan Ruiz que agarrara la manija y cambiara de ritmo pero el exhombre de San Lorenzo apareció en cuentagotas.

Se cuidaban más de lo que arriesgaban. Mucha prolijidad y poca sorpresa en Independiente. Cuando el equipo de Mauricio Pellegrino no cuenta con la chispa de Benítez o de Pisano le cuesta romper el molde.

En el segundo tiempo, el trámite seguía siendo parejo. Y por eso Pellegrino iba a mover el banco. Uno de los que iba a salir era Diego Vera, pero la pelota no salía afuera y el Rojo avanzaba. Pelotazo de Cuesta a la derecha, la peleó Toledo y le quedó a Méndez con toda la cancha de frente. El mediocampista levantó la cabeza y metió un centro picante, cruzado al corazón del área para el goleador. Sí, Vera. El que iba a salir, puso el 1-0 de zurda.

El gol abrió el partido. Colón salió con todo en busca del empate y Vegetti lo tuvo en su cabeza pero definió muy suave y a las manos del Ruso Rodríguez. De contra casi hace del segundo Independiente en una gran patriada de Vitale, que sacó un derechazo a colocar y la pelota dio en el ángulo.

En el cierre hubo dos chances clarísimas, un por lado. Cristian Llama sacó un latigazo tremendo de zurda que el Ruso Rodríguez mandó por arriba. Y en la réplica, con todo Colón lanzado en ataque, Vera y Benítez quedaron solos contra Broun. El uruguayo manejó bien el ataque, abrió para el juvenil y cuando todo hacía suponer que era el 2-0, definió suave y al cuerpo del arquero.

Fue justo el triunfo de Independiente. Porque siempre intentó jugar por abajo, porque fue el que mejor manejó la pelota y porque tiene individualidades que no fallan cuando aparece la oportunidad. Así estiró su gran momento y sueña con pelear arriba.