INTERNACIONALES
14 de septiembre de 2015
La visita del papa Francisco a la Argentina sería recién en 2017
Guillermo Karcher, estrecho colaborador del papa Francisco aseveró que el pontífice vendría recién en el 2017.
El encargado de ceremonial y protocolo del Vaticano y estrecho colaborador del papa Francisco, monseñor Guillermo Karcher, aseveró hoy que la visita del pontífice a la Argentina sería recién en el año 2017 y no en el 2016, tal como se había planeado en un principio.
"Yo apuntaría más al 2017 porque con el Año Santo de la Misericordia se va a hacer muy complicado que pueda dejar Roma (durante el 2016). Surgió esto en la agenda y hay que volver a plantear todos los demás compromisos", dijo hoy Karcher en declaraciones a radio América.
Según explicó, el Año Santo declarado por Francisco -que transcurrirá entre el 8 de diciembre de 2015 y el 20 de noviembre de 2016- incluirá "muchas celebraciones y eventos en Roma, para los cuales el Papa tiene que estar".
En un principio, la Iglesia argentina había invitado a Francisco a visitar el país en julio de 2016, con motivo de las celebraciones por el Bicentenario de la Independencia y del Congreso Eucarístico que se desarrollará en Tucumán, pero el papa argentino declinó la invitación por cuestiones de agenda, ya que entre el 26 y el 31 de ese mes participará de la Jornada Mundial de la Juventud en Polonia.
Karcher destacó la relación de "respeto" que hay entre el pontífice argentino y la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quienes volverán a verse el próximo fin de semana cuando la mandataria participe de la misa que Francisco presida en la Plaza de la Revolución de Cuba, en el marco de su gira por la isla y por los Estados Unidos.
Respecto al viaje, monseñor Karcher destacó que "plasma todo el trabajo que se hizo desde el punto de vista del ámbito diplomático para que estos dos estados puedan volver a darse la mano con el restablecimiento de las relaciones".
En ese marco, dijo que está previsto un encuentro "informal" del papa con Fidel Castro, así como ya lo tuvieron Juan Pablo II y Benedicto XVI cuando visitaron la isla.