Estos cardenales eran parte de un decomiso realizado en Chajarí hace más de un año y habían sido llevados a Temaiken para transitar un proceso de rehabilitación y readaptación.

“Los cardenales amarillos tienen poblaciones del litoral, del centro y del oeste. Antes de proceder a la liberación, cuando provienen del tráfico de fauna silvestre, se hace una cuarentena, se les realizan análisis, radiografías, tomografías y se los hace transitar un proceso de rehabilitación para que puedan volver a volar y un tratamiento comportamental para que puedan reconocer a los predadores y la comida”, explicó el director de Áreas Naturales Protegidas, Alfredo Berduc.

Luego, comentó que hace un tiempo se habían liberado cerca de 20 cardenales más. “El cardenal amarillo está categorizada como en peligro y desde mayo de este año está dentro de una de las categorías de área protegida como monumento natural por Ley Nº 11078, lo cual es muy importante por el estado de amenaza que tiene la especie que es muy vulnerable al cambio del uso del hábitat”, explicó Berduc.

Afirmó que esta condición de monumento natural “nos permite elevar la multa en el caso del tráfico de cardenal amarillo, que puede ser de hasta 20.000 litros de nafta”.

Respecto al trabajo de liberación realizado, dijo: “Pudimos combinar el trabajo de los organismos provinciales con organismos nacionales, con estas dos fundaciones y también con investigadores del Conicet que trabajan con la especie para poder lograr comenzar a hacer estas acciones de reintroducción, de recuperación de animales provenientes del tráfico ilegal y que también nos permiten en gran medida concientizar sobre la prohibición total que hay en nuestra provincia sobre la tenencia de aves nativas silvestres”.