Las Leonas golearon a Inglaterra y terminaron primeras en su grupo
MENDOZA. En el deporte hay goleadas regeneradoras, con poderes curativos. Una bocha que rompe la tabla, un festejo con abrazos, un grito desaforado. Episodios puntuales, gestos y reacciones que despejan la mente y disimulan cicatrices del pasado. Fue un largo año para las Leonas : del apuro por conseguir a un técnico para el Mundial de La Haya (se designó a Carlos Retegu ) a una cadena de renuncias de jugadoras postorneo que requirió la intervención y la muñeca política del presidente de la CAH, Aníbal Fernández . Todo mezclado: el hockey en su más pura esencia y los intereses individuales y colectivos. Lealtades y broncas contenidas, manifestadas por lo bajo.
Este Champions Trophy -parece- viene con propiedades sanadoras. El 4-1 de las Leonas sobre Inglaterra aseguró el primer puesto del Grupo B, pero por sobre todo, garantizó que el factor anímico está restablecido. Piti D'Elía dijo hace unos días que sentía otra energía, comparando con la experiencia agridulce en Holanda, que terminó con un tercer puesto. Se respira una atmósfera diferente, es una página en blanco que empieza a escribirse con letra firme y prolija con miras a los Juegos Olímpicos de Río 2016. Puede salir bien o mal, pero el cuento arrancó con buenos trazos.
Mañana, las chicas se medirán con China, último del Grupo A. La lógica era que llevándose la zona evitarían a Holanda hasta la final, pero el campeón mundial y olímpico apenas le ganó 1-0 a Japón y Nueva Zelanda -derrotó 2-0 a China- le arrebató el primer puesto. El mundo al revés.
"Nosotros jugamos contra cualquiera, solo queríamos ganar el grupo porque teníamos que volver a ese lugar", aseguró Santiago Capurro, que intenta un sistema que requiere mucha precisión en velocidad y las Leonas están en plena adaptación. Les hace falta tiempo para acomodarse. Pero esos desajustes, hoy, se suplen con una frescura que vino a oxigenar el ambiente. En otros tiempos, en algunos encuentros del último Mundial, por caso, ante la primera adversidad se derrumbaba la moral y el sistema colapsaba. En el partido de película ante Inglaterra, el gol tempranero de Sophie Bray resultó apenas un aviso y no una sentencia. Aún con la presión de que debían triunfar por tres goles para subirse a lo más alto del grupo, se despacharon con cuatro tantos de Rebecchi , D'Elía, Luchetti y Merino , estos dos últimos en los cuatro minutos finales. "Es un grupo bárbaro al que no le importa quién entra de titular y quién va al banco. Están todas sumando, unidas. Por algo el equipo reaccionó. "Si el grupo no estuviera bien, esta remontada no saldría ¿eh?", advierte Capurro, que fue asistente de Retegui en el gran ciclo 2009-2012 de las Leonas y en este último período.
El cambio de humor está íntimamente ligado con la renovación. "El tema de incluir chicas jóvenes influyó", reconoce el DT, que se refiere a la llegada de Agustina Habif, Pilar Romang, Julia Gomes Fantasia y Jimena Cedrés. "Ellas les dan un nuevo aire al grupo, más picardía, más ganas, un montón de cosas. Para mí es bueno darles partidos a todas y que el plantel crezca". Las Leonas están alojadas en un hotel cinco estrellas que parece una fortaleza inexpugnable. Pero entre esas paredes frías, unos pisos debajo de una terraza con vista panorámica a toda la ciudad, los corazones de las chicas se ablandan. Volvieron a escucharse entre todas, como en los viejos buenos tiempos -que fueron muchos y prolongados-, siempre con la prioridad puesta en el componente grupal. Después, el fragor del juego marcará el destino del seleccionado, pero éste es el camino para avivar el fuego interior.
En este paisaje con nuevos bríos, Luciana Aymar juega un rol aparte. Se involucra totalmente como parte activa del plantel, pero se resguarda y crea anticuerpos contra su inminente retiro. Por eso no viene hablando públicamente: no quiere que le recuerden que le restan apenas tres partidos ni tampoco abundar en el día después, sino disfrutar con este seleccionado sin distraerse. Firma autógrafos como la gran figura que es, interactúa con la gente? Eso sí: se mentalizó que importan las 18 y no solo ella y su retiro.
Las Leonas empiezan a marcar un nuevo sendero, el horizonte vuelve a estar claro. Un pie fatal en el último minuto y un córner en contra pueden desbaratar un partido, hasta un torneo. Pero no una idea que se respetará a rajatabla en la convivencia del día a día.
"El grupo está compacto", asegura Barrionuevo
"Estamos bien anímicamente, el grupo está compacto", apuntó Noel Barrionuevo, que no está siendo tenida muy en cuenta en el Champions Trophy como tiradora de córners -Capurro se inclina por D'Elía y Rebecchi- pero que sin embargo anda con buen semblante. "Ganar nos sirve mucho para la confianza. A veces muchas cosas no salen, pero apretamos el acelerador y supimos reaccionar", reflejó Macarena Rodríguez , la mendocina que recibe el cariño de su gente, con el plus de ser la capitana de las Leonas en reemplazo de Luciana Aymar.