En una Bombonera repleta, Boca jugó su segundo partido en el Grupo 5 de la Copa Libertadores ante Montevideo Wanderers, un equipo que venía de cosechar una victoria frente al Zamora de Venezuela. Con la expectativa puesta en la presencia de Pablo Daniel Osvaldo en el once titular, el mítico estadio estalló cuando los protagonistas salieron al campo.

Con una sorpresiva paciencia, el conjunto de Rodolfo Arruabarrena basó su juego en el orden propuesto por Fernando Gago y la claridad de Nicolás Lodeiro. Por lo tanto, unos instantes antes de que se cumpla el primer cuarto de hora, los de la ribera generaron una combinación entre el ex Real Madrid, Sebastián Palacios, Cristian Erbes y el uruguayo que despertó suspiros en el público local. El cabezazo desviado del oriental mantuvo a salvo al arco defendido por Leonardo Burián.

La prematura lesión de Guillermo Burdisso no modificó la fórmula del "Vasco", dado que el ingreso de Juan Cruz Komar significó un cambio de nombres, pero no de esquema. De modo que el combinado argentino continuó dañando a la visita a través de la jerarquía de su ofensiva. Un desborde de Andrés Chávez le dio la posibilidad al ex atacante del Inter de lucirse con una tijera extraordinaria. La destacada maniobra del italiano fue otra de las acciones que mereció concluir en la red, pero la falta de dirección facilitó la tarea del arquero charrúa.

A la media hora, los porteños se pusieron en ventaja a través de la pelota parada. El preciso centro de Lodeiro, junto con la pasividad defensiva, colaboró en la conquista de Komar, quien festejó el 1 a 0 desde adentro del área chica. Sin embargo, la alegría duró poco.

Como si se tratara de un partido de PlayStation, 60 segundos después, los comandados por Alfredo Arias establecieron el empate. Desde la reanudación del pleito, en el círculo central, las paredes entre Gastón Rodríguez y Diego Riolfo llevaron a que el volante con pasado en el Recreativo de Huelva defina entre las piernas de Agustín Orion y enmudezca al Alberto J. Armando.

Tuvo que aparecer la incorporación estrella para devolverle la tranquilidad el dueño de casa. En su debut soñado, el delantero capitalizó una proyección de Nicolás Colazo y con un fantástico anticipo acomodó el balón al lado del palo derecho de Burián. El grito de Osvaldo llegó en el momento justo, y Boca salió al complemento con la armonía pertinente del caso.

El egoísmo de Sebastián Palacios y el cansancio del atacante del Southampton atentaron contra la goleada, ya que el "Xeneize" creó ocasiones como para liquidar el duelo, pero la ineficacia los delanteros mantuvo el desenlace con suspenso.

Sin embargo, las limitaciones de Montevideo Wanderers no despertaron ninguna amenaza en la zona de Orion. Con la victoria, los de Arruabarrena quedaron en la cima en soledad con puntaje ideal. Punta que buscarán defender el 11 de marzo cuando reciban al Zamora.